En Ciénaga, Magdalena el paisaje es desolador y los campesinos están desesperados porque sus cultivos no han podido llegar al mercado a causa del olvido en el que los tiene el Estado.
Toneladas de mango se están pudriendo al sol y al agua porque no hay como llevarlos a los clientes.
Estas frutas son propias de la región, mangos de azúcar e hilaza que son cultivados por los campesinos que están quedando sin sustento por las políticas del gobierno que han permitido que el daño siga y no parece tener una pronto solución.
Este mango, según la Asociación Hortifrutícola de Colombia, es uno de los más apetecidos en el mundo, en especial en Europa y Magdalena es el tercer productor de esta fruta. Sin embargo, ante la falta de vías para poder transportarlos se están perdiendo aproximadamente ocho toneladas por hectárea de mangos.
Esto no solo genera pérdidas económicas, sino también desempleo y un daño ambiental. Pues tampoco hay quienes se coman esos magos que se pudren, ni siquiera el ganado.
De acuerdo con El Tiempo, al menos 6.000 empleados se han visto afectados, pues hay familias enteras que se dedican a esto.
¿Y el gobierno qué ha hecho?
Son muchos los obstáculos que tiene que atravesar los habitantes para poder llegar hasta las fincas, muchas trochas. Ahora es más difícil si hablamos de camiones de carga.
Algunas de las frutas que alcanzan a distribuir es gracias a carros particulares e incluso las mulas. Sin embargo, a este problema se le suma la falta de compradores y ni siquiera el municipio ha querido echarles una mano.
Lo único que les queda por hacer es adornar las vías con los mangos, por medio de varios videos quisieron hacer pública la problemática para ver si reciben una respuesta por parte del gobierno.
#EnVideo | Así lucen las montañas de mangos que se pudren al sol sin que nadie los lleve a un mercado en Ciénaga, #Magdalena. Lea aquí la historia completa: https://t.co/yuEW9jeNfN pic.twitter.com/HZhmHivBCO
— EL TIEMPO Colombia (@ColombiaET) May 23, 2019
Algunos ciudadanos afirman que a los dirigentes estos problemas los tienen sin cuidado y les resta importancia. En ocasiones ignoran que eso forma parte de la economía del país y el avance social.
En estos momentos hay familias venezolanas que han encontrado en la producción de mango una oportunidad de salir adelante, pero por esta situación han visto frenado su progreso.
En varias oportunidades el municipio les ha prometido construir una empresa empacadora y procesadora de mango, pero como dicen los mismos campesinos, estas palabras se las ha llevado el viento y hasta ahora no han hecho nada.
Lo peor es que cada día las cifras aumentan más y algunos se siguen haciendo los de la vista gorda.