Erika Martínez confirmó que el comparendo que le puso la Policía no fue por preguntar el precio de una empanada sino por irrespetar a la autoridad.
Sin embargo, califica la multa como injusta. En diálogo con Noticias Caracol la joven aseguró que ella no llegó a insultar al Policía.
Precisó que notó un puesto nuevo de empanadas y como también había policías se les acercó para preguntarles si podía comprar una.
Ella tenía la duda debido a la cantidad de memes, noticias y al comparendo que le pusieron a Stiven Claros por comprar empanas en la calle.
Martínez manifestó que cuando se acercó a hacer la pregunta al uniformado fue él el grosero.
«Entonces le pregunto que sí podía comprarla y él me dice cómprela y le hago un comparendo», declaró la joven.
Entonces Erika le preguntó por la razón del comparendo si lo único malo que iba a hacer era comprar la empanada.
Y el patrullero, según su versión, le contestó de forma grosera:
«Ya le dije si la compra le hago el comparendo».
Finalmente el uniformado le hizo la multa y a su juicio se la entregó mala manera.
«Me hace sentir como si estuviera leyéndole los derechos a un capturado», recordó Erika.
Aumentaron sanciones por irrespeto a la autoridad
Por su parte la Policía emitió un comunicado en el que indica que la sanción monetaria se le impuso a esta ciudadana porque ella fue grosera con la autoridad.
Y sí, Erika Martínez reconoce que fue grosera pero aclaró que fue después de que le hicieron el comparendo.
Además indicó que cuando fue ella la que reaccionó airadamente el policía le pidió a la patrullera que lo acompañaba que grabara.
«Pero cuando mi compañera estaba grabando en algún momento él le dijo que si grababa también le hacía un comparendo», recalcó la joven.
Ahora ella se tendrá que presentar ante la Inspección de Policía para aclarar su situación.
Mientras tanto la Policía dijo que desde que sucedió el primer caso de comparendo por la compra de empanadas en la calle han impuesto otras 78 multas por irrespeto a la autoridad.