En España descubrieron a un colombiano que habría fingido ser sacerdote durante 20 años.
Se trata de Miguel Ángel Ibarra.
En octubre de 2017 él llegó a Cadiz proveniente de la arquidiócesis de Santa Fe de Antioquia.
Todo dentro de un acuerdo firmado con la diócesis de Cadiz y Ceuta.
El diario El País de España informó que Ibarra para viajar a ese país había presentado la documentación requirida en estos casos.
Y que además acreditaba la experiencia del ejercicio sacerdotal en otras diócesis de Colombia.
El citado medio de comunicación precisó que Miguel Ángel Ibarra venía ejerciendo como cura desde el 4 de enero de 1998.
Y que descubrieron la supuesta falsedad de su ordenación por un informe de Noticias Caracol.
Al enterarse de esta información Ibarra fue suspendido de sus labores.
Según Elheraldo.co, en un comunicado la diócesis de Cadiz precisó que una investigación había permitido descubrir la farsa del colombiano.
«Tras una denuncia de falsedad en sus documentos de ordenación, se había llevado realizado una investigación que concluyó que Miguel Ángel Ibarra no fue ordenado sacerdote», dice el comunicado.
Sin embargo, El País precisó que Miguel Ángel Ibarra dice que fue ordenado en 1998.
Dicha ordenación habría sido oficiada por Augusto Trujillo Arango, entonces arzobispo de Tunja, en su capilla privada.
Ahora Ibarra deberá comparecer ante el obispo Orlando Antonio Corrales, arzobispo de Santa Fe de Antioquia.
Y de acuerdo con el diario español, el colombiano confirmó que cumplirá esa cita y que acudirá con un abogado.
No se tienen que volver a casar
Entre tanto, la diócesis de Cádiz y Ceuta indicó que la eucaristía y las confesiones realizadas por Ibarra no son válidas
Pero aclaró que «la gracia de Dios actúa sobre los fieles que fueron engañados».
Los que sí siguen siendo válidos son los matrimonios y los bautizos oficiados por el falso religioso.
«La gente no tiene que volver a casarse ni bautizarse», precisó la diócesis.