Brian Varela, un joven de 20 años, hace contados días fue la portada de varios periódicos en Washington, Estados Unidos.
El hombre fue hallado culpable de un crimen que ha sido calificado de atroz, inhumano y violento, contra una joven de 18 años identificada como Alyssa Nocesda, estudiante de secundaria.
La gravedad del crimen contrasta con la pena que recibió de 34 meses de prisión a pesar de haber sido hallado culpable de asesinato en segundo grado, violación en tercer grado y posesión de drogas.
El 4 de febrero del presente año, Alyssa Nocesda fue invitada a una fiesta por parte de Varela.
Allí, en medio de las drogas, el alcohol, la música y los excesos, la joven habría consumido analgésicos y fumado marihuana líquida.
Su cuerpo no resistió y quedó inconsciente por varias horas, incluso Varela llevó a su casa a la joven mientras se recuperaba.
Pero sus intensiones eran otras.
El ente acusador pudo comprobar que Varela abusó sexualmente de Alyssa Nocesda mientras esta estaba agonizando por las sustancias, también se tomó fotografías con ella inconsciente y luego se puso a jugar video juegos hasta quedar dormido.
A la noche siguiente Varela fue a su trabajo en un local de comidas rápidas y, sin ningún escrúpulo, le reveló a su compañero de trabajo lo que había hecho con la joven.
El aviso de este alertaría a la policía que, al llegar a vivienda del Varela, reconocido expendedor de drogas, encontró a la joven muerta con sus extremidades rotas, al parecer con el propósito de ser empacada en una caja para desaparecer su cuerpo.
Varela fue capturado y solo hasta la semana pasado un juez del condado de Snohomish, lo sentenció a tres años de prisión, una condena irrisoria, ya que la defensa pedía cadena perpetua por la gravedad de los hechos.
Gina Pierson, la madre de la chica, manifestó que no se rendirá y buscará todos los medios hasta conseguir una pena ejemplar para este asesino.